El pasado mes de marzo Apple presentó su último dispositivo hasta la fecha, el iPhone SE, escuchando a todos esos usuarios que demandaban un terminal tope de gama con dimensiones reducidas (tanto en Android como en iOS), y aprovechando así esta nueva apuesta para cambiar el rumbo de la compañía, la cual ha sufrido un declive en sus ventas en los últimos meses.

Es un lanzamiento «especial» para los de Cupertino, ya que es el terminal más barato en todo el catálogo de la manzana mordida: exactamente 489 euros. Eso sí, con truco. Este precio es el que tiene su versión base, de 16GB; aunque como ha dicho propiamente Apple, su objetivo es potenciar el margen de beneficios en la versión de 64GB, que tiene un precio de venta de 589 euros.

Sin embargo, los analistas no han querido demorarse en averiguar qué es lo que lleva este iPhone SE en sus entrañas. La gente de Trefis se ha encargado de desmontar el dispositivo y analizar cada componente para comprobar su coste y los resultados son apabullantes. 185 dólares, algo más de 160 euros, es lo que le costaría a Apple fabricar y ensamblar su último dispositivo lanzado en su versión de 16GB.

Entre sus componentes, el informe destaca los 22 dólares que les cuesta el procesador A9 y los 20 dólares de la pantalla LCD IPS que monta el smartphone, fabricado por LG. Es la misma pantalla que les costó 41 dólares montarla en el iPhone 5 en 2013, de ahí que su precio sea más bajo.

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Esta tabla a más de uno en la sede Apple le puede provocar sarpullidos, pero el hecho es que refleja que el iPhone SE es el terminal que más costes de producción le supone a la empresa fundada por Steve Jobs, exactamente un 46%. Por ello, es el dispositivo que menos margen de beneficios les deja a la compañía, ya que en los casos del iPhone 6 y 6s no superaba ni el 38%. Aún así, le siguen sacando una rentabilidad de unos 326 euros repartidos en gastos de marketing, distribución, etc.

Dejando de lado el expectante número de ventas que puedan conseguir con este último iPhone, es evidente que el gigante de Cupertino no está pasando por su mejor momento y toda esperanza de cambiar la tendencia negativa quedará en el lanzamiento del iPhone 7.